Darwin Enríquez lleva la Inteligencia Artificial al tatuaje

Desde hace 25 años, Darwin ha venido imponiendo su propio estilo realista, siendo de los tatuadores más influyentes

New York, Estados Unidos. – La Inteligencia Artificial (IA) llegó para revolucionar el mundo y Darwin Enríquez le da un giro a la industria del tatuaje con el sistema DALL – E2, una creación de OpenAI, y el laboratorio independiente de investigación, Midjourney, para realizar alucinantes diseños realistas.

Darwin Enríquez, además de ser un exponente del realismo 3D, es un innovador nato, conocido por hacer de la tecnología su mejor aliada, a la hora de crear nuevas propuestas artísticas que trascienden en el tiempo.

Es un visionario capaz de ver oportunidades en su campo, a través de las nuevas actualizaciones y eso vio en la IA, el sistema que busca imitar la inteligencia humana.

En las creaciones del artista, la originalidad es la base y, en la búsqueda de novedosos diseños de tatuajes, utiliza la Inteligencia Artificial para crear versiones personalizadas para sus clientes e inspirarse en ellas.

También, ha utilizado la fotogrametría y otras herramientas digitales para crear plantillas que le han permitido lograr un realismo casi imposible de hallar con métodos tradicionales.

Recientemente, entrenó una red neuronal, algo parecido a un pequeño cerebro que se adiestra para que realice una determinada tarea: «Entrené una red neuronal con imágenes de la escultura de Zeus, para generar nuevas versiones de ellas.

A veces, es difícil encontrar la imagen perfecta en Pinterest o en otras fuentes en línea y tener que usar la misma imagen de referencia, varias veces, puede ser aburrido.

Con el entrenamiento de la red, los artistas del tatuaje pueden crear nuevas versiones de la escultura de Zeus, de manera rápida y precisa, que les permitan hacer diseños personalizados y únicos para sus clientes», aclara Enríquez.

‌Considera que la tecnología debe ser una herramienta para facilitar el trabajo, mejorar las técnicas y el estilo, pero nunca sustituir el talento de los artífices, ya que el profesionalismo debe prevalecer en las obras que realizan.

Y así es como el tatuaje sigue evolucionando, retándolos a crear nuevas propuestas de artes que superen las anteriores.

‌Desde hace 25 años, Darwin ha venido imponiendo su propio estilo realista, siendo de los tatuadores más influyentes y, además, propietario de «Inknation Studio», el estudio que reúne en el corazón del Times Square de New York a grandes artistas de Sudamérica y los Estados Unidos.

Su impecable trayectoria le ha permitido ganar premios en importantes convenciones y ha hecho que las miradas estén puestas en su trabajo, a la espera de las innovaciones del tatuador.